🌱 Sangre del cordón umbilical: una esperanza para mujeres con infertilidad

La infertilidad femenina es una realidad que afecta emocional y físicamente a millones de mujeres en el mundo. En muchos casos, el problema no está en los óvulos ni en los embriones, sino en el endometrio, ese tejido interno del útero que debe estar sano y receptivo para permitir la implantación. Hoy, gracias a los avances en medicina regenerativa, la sangre del cordón umbilical emerge como una alternativa prometedora para mejorar la fertilidad en mujeres con patologías endometriales. ¿Cómo funciona? ¿Qué dicen los estudios? Te lo contamos.
¿Qué tiene de especial la sangre del cordón umbilical?
La sangre del cordón umbilical contiene plasma rico en plaquetas (PRP), una sustancia con alta concentración de factores de crecimiento y propiedades antiinflamatorias. Estos elementos son clave para la regeneración de tejidos, y en este caso, para mejorar el grosor y la estructura del endometrio.
A diferencia del PRP obtenido de la propia paciente, el PRP alogénico (donado) del cordón umbilical tiene mayor potencia regenerativa, lo que lo convierte en una opción terapéutica ideal para mujeres con endometrios dañados, finos o atróficos.
¿Qué patologías puede tratar?
Este tratamiento está dirigido especialmente a mujeres con:
- Síndrome de Asherman: formación de adherencias o cicatrices en el útero, generalmente tras legrados o cesáreas.
- Endometrio fino o atrófico: cuando el revestimiento uterino no alcanza el grosor adecuado para la implantación.
- Fallos de implantación recurrentes: tras varios intentos fallidos de embarazo, incluso con técnicas de reproducción asistida.
Estas condiciones suelen resistirse a los tratamientos hormonales convencionales, lo que hace del PRP de cordón umbilical una alternativa menos invasiva y más eficaz.
¿Cómo se aplica el tratamiento?
El procedimiento consiste en una inyección intrauterina de PRP obtenido de sangre de cordón umbilical donada. Antes de la aplicación, se verifica la compatibilidad sanguínea (grupo y Rh) y se evalúa el estado del endometrio mediante ecografía.
Tras el tratamiento, se realiza un seguimiento para observar cambios en el grosor y el patrón del tejido. En estudios recientes, el 90% de las pacientes tratadas lograron transformar un endometrio no funcional en uno trilaminar y receptivo.
Resultados que inspiran
Según la Dra. Irene Cervelló, investigadora principal del estudio presentado en el Congreso Europeo de Reproducción Humana y Embriología (ESHRE), los resultados fueron “exitosos en su totalidad”. Las pacientes mostraron una mejora significativa en el grosor y la estructura del endometrio, lo que aumentó sus posibilidades de embarazo.
Este patrón trilaminar funcional es considerado ideal para la implantación embrionaria, y su aparición tras el tratamiento representa una esperanza real para mujeres que han enfrentado años de infertilidad sin respuestas.
Conclusión: Una nueva puerta hacia la maternidad
La sangre del cordón umbilical, que hasta hace poco se desechaba tras el parto, hoy se convierte en una herramienta poderosa para restaurar la fertilidad. Si bien aún se requieren más estudios, los avances actuales ofrecen una alternativa segura, efectiva y emocionalmente esperanzadora para quienes sueñan con ser madres.
💫 La ciencia avanza, pero el deseo de ser madre sigue siendo el motor. Si estás atravesando un camino difícil hacia la maternidad, consulta con tu especialista sobre nuevas opciones como esta. La esperanza también se regenera.